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Juan Gelman 

 

Cita XVI

¿de este destierro subo a tu hermosura? /
¿entras en mí como contento? / ¿lágrimas
de contento o congoja? / ¿por qué aprietan
al corazón? / ¿tu mano es? / ¿apretando?/

 

¿acariciando moviendo? / ¿tus labios
besándome son? / ¿tu calor? / ¿tu pura
pasión donde me quiebro la cabeza? /
¿torpe? / ¿lágrimas o deseos? / ¿altos


en la humildad que das? / ¿bondad que sos? /
¿y qué es amar? / ¿o son señales del
amor lo que se ve? / ¿amar muchísimo? /
luz que bañas el apretado sueño /


meditación que vuela como pájaro
desatándome el cuerpo / corazón
que entendés en silencio / corazón /
como la tortolita del pensar.


Gelman, citando a, Santa Teresa, para celebrar el Día de la Militancia, tal como lo celebra Factor Francisco. Inesperado el encuentro entre la militancia y la mística, pero nada arbitrario. «Es fundamental, es necesario, es probablemente indispensable», dice FF, «que gestemos una nueva mística, una espiritualidad abierta que nos sostenga, una capacidad de cultivar lo más propio de cada uno – una interioridad- que vaya acompañada tanto de la capacidad de encontrarse con valientemente con todos como la de proyectarse con una nueva solidaridad. Esta hipótesis supone también una autocrítica: supone que algo de la mística que gestamos en años anteriores, que por otro lado ha sido fundamental para traernos hasta acá es de todos modos insuficiente para lo que nos toca hacia el futuro. Por otro, se entiende esto, que puede sonar extraño o contradictorio: que el capitalismo, el neoliberalismo, o el sistema -como queramos llamarlo, nos referimos a la forma hegemónica que se impone a la vida personal y colectiva – en muchos casos ha sabido prestar más atención a estas “necesidades espirituales” de la gente común, que algunos espacios políticos populares nuestros. El capitalismo es una religión. Y el alma humana es uno de sus objetivos. Si desde nuestros espacios de militancia política no se logran tocar algunas cuerdas del alma de cada uno, difícilmente se podrá dialogar y construir una solidaridad popular y colectiva.»

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